Lactancia materna exclusiva
Os voy a dejar por aquí mi experiencia con la LME.
Yo tuve mucha suerte cuando me quedé embarazada, porque la matrona que estaba en mi centro de salud era maravillosa (o al menos para mí lo fué)
Desde el principio nos explicó cosas importantes para los bebés y para los padres.
A mi lo qué más me sirvió fue el tema de la lactancia.
Yo quería darle el pecho a mi hija,pero también era consciente que las cosas podían no salir como yo esperaba.
Por suerte nuestra lactancia fue bien, y en parte fué gracias a que Ana, mi matrona, nos dió unos consejos maravillosos.
En esa época yo aún no había descubierto a Lucía...
El mejor y más valioso consejo que nos dio fue que hiciéramos siempre lo que pensáramos que era mejor para nuestros bebés y para nosotras/os.
Yo empecé la lactancia bien, pero es cierto que hubo un momento en el que estaba agotada, la peque lloraba y calmarla era ponerla de un pecho al otro casi todo el día y así un día tras otro. Habia días que la que lloraba era yo, porque no podía con mi alma.
Ella nos comentó que según van creciendo su necesidad de alimento aumenta, y para que el pecho de más leche tienen que mamar más, así que yo seguí dándole el pecho.Llegamos a la alimentación complementaria y seguimos también con el pecho, ahí ya fue todo más fácil y más rodado, la experiencia y la comida me daban más juego.
Y así llegamos hasta los casi 4 años que estuvimos manteniendo la lactancia.El final fue algo natural y sin forzarlo.
A día de hoy me siento muy orgullosa de mi misma,porque fui capaz de aguantar los meses más malillos y llegar hasta donde llegamos.
Así que si estás leyendo esto, te animo a que sigas el camino, que todo pasa y todo llega ❤️